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En los otros deportes podemos identificar casos representativos en un horizonte de practicantes que está destacando.
En el mundo del deporte, existe una fascinante variedad de disciplinas que van más allá del fútbol, el baloncesto y el tenis, que suelen acaparar la mayoría de la atención mediática. La pregunta que se plantea es si estos deportes “menos populares” merecen ser considerados los “patitos feos” del mundo deportivo. Para responder a esta pregunta, debemos explorar algunos ejemplos de deportistas latinoamericanos, que han triunfado en estas disciplinas, demostrando que no deberían pasar desapercibidos y que necesitan toda la atención que otros deportes reciben.
Éxito en los otros deportes: deportistas de L.A. que dieron pasos importantes
Los casos de Agustín Pichot, Fernando Valenzuela, Caterine Ibargüen, Egan Bernal y Sofía Mulánovich demuestran que el éxito puede encontrarse en cualquier disciplina, y que estos deportistas son una fuente de inspiración para todos aquellos que buscan triunfar en campos menos explorados del deporte. La pasión y el esfuerzo no conocen fronteras ni deportes “feos”, solo oportunidades esperando ser aprovechadas.
Rugby: Agustín Pichot (Argentina)
En el corazón de Argentina, un país apasionado por el fútbol, un deportista logró destacarse en un terreno diferente: el rugby. Agustín Pichot, como capitán de Los Pumas, el equipo nacional de rugby argentino, lideró al equipo a un logro histórico en la Copa del Mundo de Rugby de 2007, obteniendo el tercer lugar. Su determinación y habilidades en el campo de juego inspiraron a toda una generación de jóvenes argentinos a explorar este deporte menos tradicional en su país. Pichot es un recordatorio de que el éxito no se limita al deporte más popular de la región.
Béisbol: Fernando Valenzuela (México)
En México, el béisbol es uno de los deportes más queridos, y Fernando “El Toro” Valenzuela se convirtió en un ícono de este deporte en su país y más allá. Su éxito en las Grandes Ligas de Estados Unidos, donde ganó el premio al Jugador Más Valioso de la Liga Nacional en 1981, demostró que los latinoamericanos podían sobresalir en el béisbol, un deporte tradicionalmente dominado por los estadounidenses. Valenzuela es un ejemplo de cómo un deporte “menos popular” puede generar admiración y orgullo nacional.
Atletismo: Caterine Ibargüen (Colombia)
Caterine Ibargüen, originaria de Colombia, ha dejado una huella imborrable en el mundo del atletismo, específicamente en el salto triple. Sus múltiples títulos mundiales y su medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en 2016 la destacan como una de las atletas más talentosas y exitosas de América Latina. Su historia de perseverancia y dedicación sirve como inspiración para los jóvenes atletas en Colombia y muestra que el atletismo puede ser una fuente de triunfo para la región.
Ciclismo: Egan Bernal (Colombia)
Egan Bernal, también de Colombia, ha logrado lo impensable en el mundo del ciclismo. En 2019, se convirtió en el primer colombiano en ganar el Tour de Francia, una de las competiciones más prestigiosas del ciclismo mundial. Su éxito ha inspirado a una nueva generación de ciclistas en su país y ha demostrado que el ciclismo latinoamericano puede competir a nivel internacional. Su historia es una prueba concreta de que, incluso en un deporte de nicho, los deportistas latinoamericanos pueden alcanzar la cima.
Surf: Sofía Mulánovich (Perú)
Perú también tiene su propio ejemplo de éxito en un deporte menos convencional: el surf. Sofía Mulánovich, nacida en Punta Hermosa, Perú, se convirtió en la primera mujer peruana en ganar un título mundial de surf en 2004. Su logro inspiró a toda una generación de jóvenes peruanos a tomar las olas y a creer en sus propias capacidades para triunfar en el deporte.
Estos ejemplos refuerzan la idea de que los deportes “menos populares” no deben ser considerados “patitos feos”. Más bien, son oportunidades para celebrar la diversidad y la riqueza del mundo deportivo. Cada deporte tiene su propio conjunto de héroes y logros que merecen atención y reconocimiento.
